domingo, 4 de septiembre de 2011
Osho
"Siempre que te sientas triste, siéntate en silencio y deja que
esa tristeza te invada;
no trates de escapar de ella. Siéntete lo más triste que
puedas. No la evites. Recuerda esto. Llora al máximo, tírate
por el suelo, revuélcate... y deja que desaparezca por sí
misma.
No la expulses; se irá, porque nada permanece para
siempre.
Cuando se vaya, te sentirás descargado, absolutamente
aliviado, como si toda fuerza de gravedad hubiera
desaparecido y pudieras volar, sin peso alguno. Es el
momento de entrar en ti mismo. Primero, ábrete a la
tristeza. Corrientemente, no te abres a ella; buscas sistemas
para poder fijarte en otras cosas; vas al restaurante, te
reúnes con amigos, lees un libro o vas al cine, o tocas la
guitarra; haces algo para poder sumirte en ello y distraer tu
atención.
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muy hermoso y lindo consejo
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